Óscar Valdés Dancuart Presidente del Consejo de Ministros
Están reunidos en Lima los ministros y ministras del Ambiente y otros importantes funcionarios de Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Suriname y Venezuela, todos países amazónicos que participan en la Segunda Reunión de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA).
En este cónclave de alto nivel se discutirá el monitoreo de la deforestación para proteger los bosques, la definición de criterios de sostenibilidad del manejo forestal, el combate de incendios forestales, así como la gestión de recursos hídricos transfronterizos y el uso sostenible de la diversidad biológica.
Los acuerdos concretos a que arriben tienen vital importancia para el futuro de la Amazonía, una de las mayores reservas naturales que tiene directa vinculación con la preservación de la vida en la región y en el planeta.
Dicha reunión se produce en los precisos momentos en que el gobierno del presidente de la República, Ollanta Humala Tasso, impulsa una política coherente y eficaz para preservar el medioambiente en todo el territorio nacional y, de modo especial, en zonas amazónicas de alta biodiversidad como Madre de Dios.
En este terreno, el Gobierno ha decidido penalizar a la minería ilegal que depreda suelos, bosques y envenena el agua de los ríos y manantiales, destruyendo las cadenas ecológicas.
A la luz de las acciones efectuadas por el Gobierno peruano en los meses que lleva de gestión, puede decirse que el nuestro es un Estado que predica con el ejemplo, de acuerdo con su política de promover las inversiones nacionales y extranjeras en el sector minero extractivo, siempre y cuando las empresas se comprometan a cumplir estrictamente con los estándares internacionales y la legislación nacional en defensa y protección del medioambiente.
Otro de los pilares que sostienen esta política productiva y, a la vez, ambiental, es el diálogo.
Ayer, precisamente, empezaron con éxito las conversaciones del Gobierno y los mineros informales del corredor minero de Madre de Dios, con el propósito de legalizar y formalizar plenamente sus actividades, habiéndose llegado a un primer acuerdo previo dentro de un proceso de diálogo abierto y responsable.
Más allá de las zonas autorizadas, según lo ha ratificado el presidente del Consejo de Ministros, Óscar Valdés Dancuart, el Gobierno aplicará con firmeza los decretos legislativos que tipifican y penalizan el delito de minería informal.
Es necesario subrayar que en cuanto al diálogo, el Gobierno está cumpliendo fielmente con su palabra al instalar varias mesas de trabajo para ordenar la actividad minera y el manejo de los recursos hídricos y forestales, como es el caso de Madre de Dios, Apurímac, Tacna, Cajamarca, y otros puntos del país.
Otro factor importante es el manejo multisectorial de los procesos de diálogo, como lo demuestra la presencia del ministro del Ambiente, Manuel Pulgar-Vidal, el titular de Energía y Minas, Jorge Merino Tafur, y técnicos especializados de esos sectores.
Se propugna, asimismo, la participación y la corresponsabilidad de los gobiernos regionales y locales de las zonas involucradas. La defensa del medioambiente es prioritaria para todos los peruanos. La producción y el crecimiento económico, también.
Están reunidos en Lima los ministros y ministras del Ambiente y otros importantes funcionarios de Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Suriname y Venezuela, todos países amazónicos que participan en la Segunda Reunión de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA).
En este cónclave de alto nivel se discutirá el monitoreo de la deforestación para proteger los bosques, la definición de criterios de sostenibilidad del manejo forestal, el combate de incendios forestales, así como la gestión de recursos hídricos transfronterizos y el uso sostenible de la diversidad biológica.
Los acuerdos concretos a que arriben tienen vital importancia para el futuro de la Amazonía, una de las mayores reservas naturales que tiene directa vinculación con la preservación de la vida en la región y en el planeta.
Dicha reunión se produce en los precisos momentos en que el gobierno del presidente de la República, Ollanta Humala Tasso, impulsa una política coherente y eficaz para preservar el medioambiente en todo el territorio nacional y, de modo especial, en zonas amazónicas de alta biodiversidad como Madre de Dios.
En este terreno, el Gobierno ha decidido penalizar a la minería ilegal que depreda suelos, bosques y envenena el agua de los ríos y manantiales, destruyendo las cadenas ecológicas.
A la luz de las acciones efectuadas por el Gobierno peruano en los meses que lleva de gestión, puede decirse que el nuestro es un Estado que predica con el ejemplo, de acuerdo con su política de promover las inversiones nacionales y extranjeras en el sector minero extractivo, siempre y cuando las empresas se comprometan a cumplir estrictamente con los estándares internacionales y la legislación nacional en defensa y protección del medioambiente.
Otro de los pilares que sostienen esta política productiva y, a la vez, ambiental, es el diálogo.
Ayer, precisamente, empezaron con éxito las conversaciones del Gobierno y los mineros informales del corredor minero de Madre de Dios, con el propósito de legalizar y formalizar plenamente sus actividades, habiéndose llegado a un primer acuerdo previo dentro de un proceso de diálogo abierto y responsable.
Más allá de las zonas autorizadas, según lo ha ratificado el presidente del Consejo de Ministros, Óscar Valdés Dancuart, el Gobierno aplicará con firmeza los decretos legislativos que tipifican y penalizan el delito de minería informal.
Es necesario subrayar que en cuanto al diálogo, el Gobierno está cumpliendo fielmente con su palabra al instalar varias mesas de trabajo para ordenar la actividad minera y el manejo de los recursos hídricos y forestales, como es el caso de Madre de Dios, Apurímac, Tacna, Cajamarca, y otros puntos del país.
Otro factor importante es el manejo multisectorial de los procesos de diálogo, como lo demuestra la presencia del ministro del Ambiente, Manuel Pulgar-Vidal, el titular de Energía y Minas, Jorge Merino Tafur, y técnicos especializados de esos sectores.
Se propugna, asimismo, la participación y la corresponsabilidad de los gobiernos regionales y locales de las zonas involucradas. La defensa del medioambiente es prioritaria para todos los peruanos. La producción y el crecimiento económico, también.
